Para que sus nombres no se borren... (Parte II)

 

Matilde Landa y Vilma Espín

Matilde Landa, Badajoz (24-6-1904/ 26-9-1942)

Matilde Landa pasó su infancia en Badajoz donde estudió el Bachillerato y en 1923 se trasladó a Madrid con el objeto de estudiar Ciencias Naturales y entra en contacto con la Resistencia de Estudiantes y con la Institución Libre de Enseñanza. Durante la Segunda República inició su militancia política. Ingresó en el Partido Comunista poco antes de la Guerra Civil. Tras el golpe de Estado de julio de 1936, se incorporó a las tareas sanitarias de un hospital de sangre en Madrid donde organizó toda la asistencia en los frentes así como su evacuación. Pronto pasó al Socorro Rojo Internacional, colaborando en la evacuación de Málaga y en el Cuartel de las Brigadas Internacionales de Albacete. En 1938 pasó a la Subsecretaría de Propaganda del Gobierno Republicano. Recorrió por entonces numerosas ciudades de la Península, dando conferencias para levantar la moral de los combatientes y explicar la causa de la República y de la guerra.

En esta época conoció a Miguel Hernández que pertenecía al Quinto Regimiento quien le dedicó el poema “A Matilde”. Poco antes de la derrota de la República, fue encargada de reorganizar el Partido Comunista de Madrid, pero ella, junto con sus compañeros fueron delatados y hechos prisioneros. En septiembre de 1939 ingresó en la cárcel de Ventas donde desarrolló una extraordinaria labor de ayuda a las presas condenadas a muerte en su “Oficina de penadas”.

Fue condenada a muerte y posteriormente le fue conmutada la pena por la de 30 años de reclusión. En junio de 1940 y para evitar la influencia que ejercía sobre las detenidas, fue trasladada a la Prisión de Palma de Mallorca. Allí, las monjas, el capellán y la Acción Católica, la sometieron a una terrible prisión, castigos incluidos, para tratar de que se convirtiera al Catolicismo y que se bautizara lo que hubiera servido de ejemplo a las demás detenidas y de desautorización pública de la ideología de izquierdas. Esta presión y la amenaza de hacer recaer sobre los hijos de las presas su negativa hizo que su equilibrio emocional se resistiera y el 26 de septiembre de 1942 cayó desde una galería de la prisión, muriendo a las pocas horas.

 

Vilma Espín (Santiago de Cuba, 1930- La Habana, 1993)

Vila espín nació el 7 de abril de 1930 en la ciudad de Santiago de Cuba (Cuba) en el seno de una familia acomodada. La casa de Vilma Espín fue uno de los refugios de los asaltantes del cuartel Moncada durante la persecución que se llevó a cabo al finalizar el asalto a dichas instalaciones militares.

En la universidad participo activamente en las manifestaciones en contra del gobierno de Fulgencio Batista que estaba en el poder después de dar un golpe de estado en 1952  al presidente Carlos Prío Socarrás.

Estudió ingeniería química en la Universidad de Oriente y en el MIT de Boston antes de conocer al líder revolucionario Frank País en La Habana. Se hizo inseparable colaboradora de País participando activamente en las organizaciones que éste fundó. Formó parte de la Acción Nacional Revolucionaria. Cuando esta organización se integró a las filas del Movimiento 26 de julio, Vilma fue nombrada por el propio País, poco antes de su asesinato, Coordinadora Provincial de la organización clandestina en la provincia de Oriente donde se encuentra la Sierra Maestra en la que se instalaría la guerrilla.

En la Revolución Cubana: fue a México para entrevistarse con Fidel Castro y recibir órdenes y mensajes para la preparación del alzamiento rebelde en contra del gobierno de Batista. En ese viaje conoció a Raúl Castro, con quién se casaría después del triunfo de la Revolución. Bajo el mando de Frank País participó en el alzamiento de Santiago de Cuba el 30 de noviembre de 1956, como apoyo a los expedicionarios del Granma, preparando su desembarco. El cuartel general del movimiento revolucionario de Santiago quedó ubicado en su vivienda.

Una vez comenzadas las actividades guerrilleras de Sierra maestra, en 1956, apoyó a los combatientes desde el llano. Se casó con Raúl Castro en 1959. En junio de 1958 se integró a las tropas insurgentes, donde se destacó en sus acciones de coordinación y lucha guerrillera.

Papel en el gobierno: tras el triunfo revolucionario del 1 de enero de 1959 Vilma Espín fue encargada de reorganizar las diferentes organizaciones femeninas. De dicha reorganización nació la Federación de Mujeres Cubanas de la que fue presidenta.

Fue miembro del Comité Central del Partido, desde su fundación en 1965, condición que se mantuvo hasta su muerte al ser ratificada en todos sus congresos. En el congreso de 1980 fue nombrada miembro suplente del Buró Político y en el siguiente fue miembro efectivo. Se mantuvo como miembro del Politburó del Partido Comunista de Cuba hasta 1991.

Fue diputada de la Asamblea Nacional, en su primera legislatura, y miembro del Consejo de Estado desde su constitución. Presidió varias comisiones de la Asamblea Nacional como la Comisión Nacional de Prevención y Atención Social, y la Comisión de la Niñez.

Recibió múltiples condecoraciones, títulos y órdenes nacionales e internacionales, entre las que se destaca el titulo honorífico de Heroína de la República de Cuba y el Premio Lenin de la Paz.

Espín encabezó la delegación cubana al Primer Congreso Latinoamericano sobre Mujer y Niños que se realizó en Chile en 1959. También encabezó las delegaciones cubanas a las Conferencias de la Mujer realizadas en México, Copenhague, Nairobi y Pekín.

Muerte: falleció de cáncer el 18 de junio de 2007. El gobierno cubano decretó un día de duelo nacional el martes 19 de junio. Dirigentes del gobierno y el Partido Comunista le rindieron tributo en varios actos, entre ellos una velada en el Teatro Karl Marx de La Habana. Fue incinerada, y sus restos descansan en el Mausoleo del II Frente Frank.

(Fuente: Agenda de mujeres comunistas. Frente de Mujer PCM)